boomerang.

Los pensamientos se sucedian unos a otros como corriendose entre ellos, como el perro que se corre a su propia cola. Era una cascada interminable, nunca se agotaba y era siempre distinta.
Aunque intentara escaparme de eso, no podia. Esos pensamientos me seguian y venian conmigo, se quedaban en el aula, en el colectivo, en mi habitacion y en la calle.
A veces me pregunto que pasaria si pusiera mi mente en blanco. Moriria, supongo. El dia que deje de elaborar teorias sobre cosas absurdas; imaginarme que hubiera pasado si hubiera tomado decisiones distintas a las que tome; o simplemente las incoherencias que son no mas que un reflejo de lo que dice mi inconciente en realidad voy a morir. Como el delfin que no puede dormir del todo porque hay algo en su cuerpo que no puede estar inactivo, eso sucede en mi cabeza.
Sueño que salgo corriendo por un sendero llano, sin nada que me interrumpa el paso. Y es largo, larguisimo, puedo seguir horas corriendo a la misma velocidad y con el mismo impulso por mucho tiempo. Es imparable, las rodillas no me duelen y mis pies se levantan del suelo con gran entusiasmo.
De todas formas, estoy pensando en otra cosa.
Y siempre, volves.
Como un boomerang, en algun momento del sendero vas a estar y me vas a decir algo que va a lograr que mis rodillas duelan, y que mis pies se cansen.
Vos y tu rutina.
Vos y tu sencillez, tu ignorancia, tu parsimonia.

el bar.

En la voragine de las luces de neon, rojas verdes y amarillas, me detuve en esa esquina donde la gente me pasaba por al lado como si no estuviera. Me quede mirando un pedazo de la luna, pensando lo insignificante que en realidad era. Solo un circulo, un circulo blanco lejos de mi. Entonces me fui a aquel bar donde soliamos encontrarnos algunos dias, en el medio de la semana, despues del colegio. Eran encuentros apasionados, no podia evitar mirar su boca beber el cafe, la forma de sus labios que tanto me atraian, el reflejo de mis ojos en los suyos, y el reflejo de sus ojos en los mios. Nos encontrabamos en nuestras pupilas dilatadas, inconcientes, aunque muy por dentro nuestro sabiendo que lo que venia despues iba a ser mejor.
-Rubia, que vas a pedir?
No me acordaba de eso. El siempre se reia cada vez que el mozo se acercaba a nuestra mesa, con la bandeja abajo del brazo y tambaleandose entre las mesas con los ojos colorados. A mi no me causaba mucha risa, pero el tambien sabia eso, me decia que yo mantenia una imagen distante para parecer mas adulta, o como que las cosas realmente no me afectaban.
Apariencias. A mi me perturbaba desde la manera que tenia el para dirigirse hacia mi, hasta como ponia su mano en mi cintura cuando me dejaba pasar adelante de el si caminabamos.
Ahora me encontraba en aquel bar, sola, que me veia pasar casi todos los miercoles con un halo de sobriedad y cautela, como sabiendo que alla dentro me esperaba esa batalla campal de discusiones y desacuerdos que me llenaban de algo que me atraia, algo que me hacia pensar que eso iba a durar poco, y por eso me atraia mas.
Disfrutaba de sus nervios exasperados como si atras de todas esas palabras cargadas de reproches se escondieran poemas, palabras de amor y proteccion.
El mozo me seguia esperando. Le pedi una lagrima, y segui mirando la luna.
La luna hoy estaba realmente bella.

.

Valentina escucha las voces desde el baño.
Se sienta en el borde de la bañera y apoya la cabeza entre sus manos.
Le divierte pensar que esta escondida, que nadie nadie la ve, y que nadie la va a encontrar.
Mira los azulejos del baño y se hace a la idea de que ese es su refugio, que ahi esta a salvo y que no tiene que saludar a nadie por cortesia. A nadie de todas las personas que estan afuera.
No es que se sienta sola, solo cree que a veces en su casa hay mucha gente y poca paz. Hay cosas que nunca va a entender, y de todas formas, hay cosas que nunca va a preguntar.
El silencio es comodo para ella, y a veces piensa que eso es porque esta acostumbrada a el.

-

-¿y que estuviste haciendo todos estos años?
-llendo a la cama temprano.

Anotacion.

Valentina anotaba como le gustaria ser de grande, sus ideas y sus sueños.
Se imaginaba que iba a ser una actriz misteriosa y sobria, que en las fotos publicitarias iba a salir con vestidos negros, boas negras, y cigarrillos prendidos a punto de ingresar en una boca prendida en fuego, rojo carmin. Se imaginaba asi, sencilla y a la vez tan cargada de drama. Un estilo muy La Foule de Edith Piaff.
Sin embargo, ahora es distinto. No fuma, ni se viste de negro, ni es tan misteriosa como Edith Piaff. Es timida, sonrie de vez en cuando, y usa pañuelos atados en la cabeza.
Soñaba con teatros llenos, luces de colores, y camarines decorados con postales. Viajes a Paris, Barcelona, un cafe de aqui y un cafe de alla.
Peliculas, conoceria locaciones y personas con historias interesantes. Se casaria con un fotografo, bohemio, con brillo en los ojos. Se enamoraria tanto que no dejaria nunca de sentir todo lo que sienten los adolescentes en el primer amor. Tendria muchos hijos, habria hamacas en el parque, y juegos dispersos por toda la casa.
Como a los 14 años, le seguirian gustando los palitos de la selva violeta; la lluvia; abrigarse antes de salir con bufandas y tapados; las velas; las flores puestas en macetas pintadas en la ventana; ir al cine con su padre; las mariposas; los atardeceres; las fotos viejas; los besos en la punta de la nariz; escuchar hablar frances; meterse adentro de la cama despues de bañarse con el pelo mojado; tocar la humedad del suelo con los pies; el olor del pasto recien cortado;las frutillas; los lunares de sus hermanas; y la risa ajena.
Lo que no estaba dentro de sus anotaciones era que disfrutaria de todas esas cosas con la compañia de Felipe, su fulano.

bello veranito

en el verano no solo nos sumergimos en distintas aguas. no nos sumergimos solo en mares, piletas o rios. nos sumergimos en algo que es bastante mas importante, algo asi como otro ritmo.
disfrutamos del sol, y eso que el sol esta tanto en invierno como en verano. pero bueno, lo disfrutamos mucho mas, sea con amigas, primos, conocidos, mate o pareo.
incluso estando en una plaza al lado de una avenida, somos capaces de tirarnos en el pasto panza para arriba, y mirar el cielo y alguna copa de un arbol que se cuela en nuestros ojos y en lo que vemos.
y aunque estemos pegoteados, y nos moleste el pelo largo, o el calor, el verano genera esa alegria y energia necesaria como para estar todo el tiempo sonriendo, y sintiendo que los cachetes coloraditos son lo mas lindo del mundo.
valentina dice que el verano no es una estacion ni un clima, es un mundo aparte. donde definitivamente tanto hombres como mujeres estan mas lindos, y el sol hace brillar a timidos y extrovertidos, a rubios y a morochos.
y los pequeños de edad, esos si que brillan! con protector solar en toda la cara, antiparras y patas de rana, son los que mas se divierten porque son los que se animan a casi todo.
valentina cada vez que va a la playa se pregunta como hacen las madres para no tentarse en ir corriendo desesperadas al mar, con el inflable que se da vuelta y nos da vuelta, de alguna manera, a nosotras tambien.
definitivamente, el verano es el mejor momento del año. es cuando la gente se enamora con mas frecuencia, cuando los jugos de naranja y los licuados estan a la orden del dia, y cuando hay tiempo para todo.
ni hablar de la ropa que las altas temperaturas nos hacen usar. por las calles se ve tanta piel, tantos lunares, tantos collares y cabelleras al viento que valentina ya no se si llevar la camara o un estudio de grabacion para retratar todo.
y si, ahora puede. si quiere puede llevar el estudio con sonidistas incluido. porque ahora le sobra tiempo, y por ende imaginacion.
bienvenido verano!


foto: la dueña del blog al agua pato.

Camarín.

Valentina, atras del telon, es distinta. No es que esconda... simplemente, son cosas que no muestra. Como el miedo a los perros, o el disgusto que le provoca el taconeo absurdo de los zapatos en el asfalto. Hay otras cosas que tampoco asume, como que en realidad le hubiera encantando ser bailarina en una comedia musical; o ser alguna artista de bar con brillos y boas. Aparecer en peliculas de woody allen, de almodovar, ser fotografiada mientras camina de la mano de algun cantante bohemio.
Valentina a veces miente. No es que lo haga de mala, o porque no tiene otra alternativa. Solo que hay veces que prefiere mentirse a ella misma y convencerse de que cantantando "lacrimosa" en algun sucucho de san telmo no se iba a mantener, y que iba a terminar en fiestas con cocaina en su cuerpo. Porque Valentina se dice a ella misma que los artistas se drogan, que no tienen familia ni amigos, y que viven para y por su profesion, aunque sabe que todo eso es mentira. Lo hace para no sentirse tan... cobarde.
¿Por que? Hoy es un dia de piano con notas graves y poco armoniosas. Hoy es un dia en el que ni pedro ni mora ni abril la hacen feliz.
Hoy es un dia en el que le gustaria ser otra persona. O tal vez ser ella, la misma valentina de siempre, pero con 16 años, algunas materias en diciembre, y una vacante en el taller de danza contemporanea.
Valentina se mira en el espejo. Y se imagina que hubiera sido de su vida si ese espejo tuviera luces alrededor y fuera el de algun teatro. Valentina se imagina... en su camarin.